Ningún Escocés Verdadero
Ningún verdadero Escocés es una de las falacias lógicas cuando se presentan argumentos a favor o en contra de una posición.
El Libro Un Libro de los Malos Argumentos define la falacia lógica de “Ningún Verdadero Escocés” de la siguiente manera.
“Cuando nos enfrentamos al desafío de las pruebas, en vez de aceptarlas o rechazarlas, podemos contra-argumentar mediante una redefinición arbitraria de los criterios para encajar en dicha categoría”.
El siguiente ejemplo ilustra dicha redefinición:
“Hamish está leyendo el periódico y se encuentra una historia sobre un inglés que ha cometido un crimen atroz, a lo que reacciona pensando: “Ningún escocés haría eso”.
Al día siguiente, encuentra una historia sobre un escocés que ha cometido un crimen aún peor; en vez de cambiar su afirmación sobre los escoceses, reacciona diciendo: “Ningún verdadero escocés haría eso”.
Ningún Verdadero Escocés y los Testimonios de los Mormones
Ahora que tenemos claro que es el argumento de “Ningún Verdadero Escocés” podemos identificar instancias en que este es utilizado dentro de la Iglesia.
En la era de la información es común encontrarse con miembros que encuentran detalles críticos de la iglesia en medio de publicaciones en redes sociales o blogs.
Algunas de esas publicaciones en relación a temas tales como: La poligamia, los diferentes relatos de la primera visión, los origines confusos del libro de Abraham, los detalles de la traducción del Libro de Mormón, la similitud entre las ordenanzas del templo y los rituales masones y la prohibición del sacerdocio y sus ordenanzas a las personas de raza negra.
Estos se han convertido en piedra de tropiezo para muchos hermanos que alguna vez tuvieron testimonios fuertes de la Iglesia.
El Elder Neil L. Andersen se refiere a este punto de la siguiente forma:
Algunas personas ponen en duda su fe cuando encuentran una declaración que un líder de la Iglesia ha hecho hace décadas y que parece estar en desacuerdo con nuestra doctrina. (La Prueba de Vuestra Fe)
Probablemente Hans Mattson, Setenta de Área Emérito ilustra con su vida que no importa si hemos nacido dentro la Iglesia, si tenemos sangre pionera corriendo por nuestras venas o si nos hemos dedicado gran parte de nuestro corazón, alma, mente y fuerza a servir en la Iglesia, todos podemos enfrentarnos a la duda en algún momento de nuestra vida.
Una pequeña parte de la historia de Hans Mattson se encuentra en el Canal Oficial de Youtube del New York Times:
En el contexto de la Iglesia, la falacia lógica del verdadero escocés se podría ilustrar con el siguiente ejemplo :
A: “Ningún miembro de la Iglesia negaría su testimonio.”
B: “Pero mi tío John, que es mormón, negó su testimonio.”
A: “Ah, sí, pero ningún verdadero miembro de la Iglesia negaría sus testimonio.”
Si nos encontramos con un miembro de la Iglesia que duda es común que nos aferremos al mal argumento de “Ningún Verdadero Escocés” con el fin de aliviar una potencial inquietud ya que este es una salida fácil y perezosa ante problemas complejos, problemas de los cuales quizás no querramos ser parte.
Si el argumento del “Ningún Verdadero Escocés” es un argumento valido ante los miembros fuertes que ahora dudan, entonces debemos definir que es un verdadero testimonio y que es un verdadera conversión de una vez por todas y como podemos asegurarnos quienes lo tienen o quienes no, ya que los términos verdadero testimonio y conversión verdadera no pueden ser usados a gusto personal para defender nuestras posiciones.
¿Que usualmente piensas de miembros que una vez fueron fuertes en el evangelio y que han negado su testimonio?
